Por Carlos Parra
Poco se habla del verdadero impacto -ambiental, económico y social- que traerá consigo este proyecto emblema del gobierno federal y que poco a poco se ha dejado percibir desde el inicio de su construcción. Es inevitable pensar en las consecuencias negativas que traerá el tren, puesto que el desarrollo y progreso capitalista por su esencia, tiende a destruir y explotar las fuerzas productivas, los recursos naturales como los recursos humanos, usados para la producción.
En el sistema capitalista no existe una relación productiva con base en el beneficio mutuo, es decir, el capitalismo es un sistema económico, político y social, que tiene como base las relaciones sociales de producción fundamentadas en la explotación -explotador y explotado-, este vínculo genera una desigualdad de condiciones y beneficios en la repartición de la riqueza generada de la producción. Mientras el explotador se queda con el volumen más amplio de las ganancias, el explotado solo recibe lo necesario para sobrevivir y seguir produciendo.
Es por esta dinámica productiva que se vuelve irrealista pensar que, dentro de estas relaciones sociales y económicas pueda existir un beneficio mutuo para las partes implicadas en el proceso productivo -proletariado y capitalistas-, puesto que el capitalista -dueño de los medios de producción- siempre recibirá una mayor utilidad de las ganancias generadas de la producción, mientras que el explotado -el trabajador que solo posee su fuerza laboral- recibirá solo miserias.
Es esta situación que se esconde en el trasfondo del megaproyecto del tren maya, pues mientras los medios oficiales, se desgastan en afirmar que será de gran beneficio para la región sur-sureste y que producirá una derrama económica, y con ello el tan esperado desarrollo y progreso, la verdad es que, solo incentivara y agudizara las relaciones productivas, generando cuantiosas ganancias para los monopolios venideros acosta de la explotación de los recursos naturales y de la fuerza laboral.
EL TREN MAYA:
El tren maya se presenta como el proyecto de infraestructura que detonará el desarrollo en la península de Yucatán. Su construcción es en apariencia simple, incluso democrática y, en palabras de sus promotores, necesaria para acabar con la pobreza y la marginación que históricamente se vive en el sureste mexicano. Sin embargo, desde el anuncio de su construcción se ha presentado una fuerte oposición de las comunidades por dónde atravesarán los caminos de hierro, pues es evidente que el tren trae consigo más daños que beneficios (Cont).
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) ha enfatizado que el tren es un proyecto “integral” y no sólo un tren turístico. Se habla de aumentar la producción del campo, de crear infraestructura agrologística, de unir los campos de producción agropecuaria con la industria, de hacer más eficiente el traslado de mercancías de la industria manufacturera y de mejorar el comercio exterior. En pocas palabras, el tren pretende ampliar la estructura capitalista (Roberto Grajales, 2020[i]).
El tren maya es uno de los proyectos logísticos de mayor relevancia en el continente americano, por la envergadura y el costo que representa, teniendo como objetivo principal unir la región sur-sureste con el resto del país en materia logística, promoviendo no solo el transporte de personas, sino pensado en ser la vía que transporte un volumen cuantioso de mercancías producidas en la región, es decir, un transporte de carga de productos para la comercialización internacional, tales como: manufacturas, insumos agrícolas, maquila textil, etc- y con ello impulsar y detonar el sector de fabricación y transformación para la exportación.
Este proyecto posee una conexión real con el restante de los megaproyectos que se llevan a cabo en el país, y con la reafirmación del tratado de libre comercio con Canadá y Estados Unidos (por sus siglas en ingles T-MEC), está planeado para ser un engrane más en la maquinaria de producción capitalista y con ello hegemonizar la explotación capitalista en la región.
EL SUR-SURESTE:
El sur-sureste, representa alrededor del 21.4% del PIB -Producto Interno Bruto- nacional, concentra el 28% de la población, mueve alrededor del 13.2 % del volumen de exportaciones y posee el 56.7% de la informalidad laboral del país. La región ha estado en el interés de los capitalistas desde décadas pasadas, y es apenas durante la gestión de la socialdemocracia que han empezado a ver realizados sus objetivos, tal es el caso del plan Oaxaca, iniciativa que busca dinamizar la economía, con la creación de infraestructura necesaria para detonar el comercio exterior de zona ([i]).
La región sur-sureste cuenta con vastos recursos naturales y una variedad de alimentos provenientes del campo, como el café, mango, piña, tabaco, vainilla, limón, plátano y productos del mar. De igual forma la región -para el año 2017- contaba con el mayor porcentaje de participación del valor agregado regional con 65.7%, y del 2.8 % del total de las exportaciones de manufacturas enviadas hacia Estados unidos ([i]).
Desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) -en 1994-, México formo parte del proceso de integración económica internacional, mismo que género una brecha muy marcada entre el sur y el norte del país, siendo esta última donde se desarrollaron de manera más acelerada las fuerzas productivas. El proyecto del tren maya está pensado para dinamizar dichas fuerzas con las que cuenta la región y con ello agudizar las relaciones sociales-productivas, agudizando la lucha de clases en esta parte del país, que se niega a ceder, es este proceso que se pretende incrementar los beneficios de los monopolios, todo esto disfrazado en la promesa de un “crecimiento económico” para la zona.
Para ello se busca impulsar las principales actividades productivas que la componen, como es el sector de la industria hotelera y turística, que se vio altamente beneficiada con la integración internacional, y que, con la construcción del tren, se pretende incrementar las ganancias para los principales consorcios hoteleros, -recordemos que solo en la zona turística del caribe mexicano, los consorcios Españoles son los que controlan alrededor del 80% del sector, generando consigo cuantiosas ganancias que van a parar a las manos de este reducido circulo.
La industria inmobiliaria misma que en el estado de Yucatán ha tenido auge en los últimos 10 años, generando consigo una burbuja de especulación inmobiliaria dejando a su paso una estela de casas sin habitar y un porcentaje importante de personas sin hogar -el sector inmobiliario será uno de los sectores fuertemente impulsados por la construcción del tren maya, pues se espera que este atraiga el interés de inversores nacionales y extranjeros en la rama-.
La industria maquiladora y manufacturera para exportación, que por sus condiciones le resulta favorable contar con una vía férrea de tal magnitud, reduciendo costos en logística, y transportación y agilizando el proceso de internacionalización -solo en el estado de Yucatán se cuenta con más de 40 maquiladoras pertenecientes al Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación ([i])-.
El sector estratégico de la industria cárnica, la cual cuenta con una importante presencia en el estado de Yucatán, posicionando lo -en el cierre del año 2019- como el primer lugar de exportación de carne de cerdo de México, llegando a países como Japón, Estados Unidos, Canadá, Corea del Sur, Chile y China ([i]).
Estas actividades productivas y sectores estratégicos -fuerzas productivas- se verán dinamizados con la llegada de capital financiero -nacional e internacional-, trayendo consigo el desplazamiento o la llegada de empresas, naves industriales, la creación de un número mayor de granjas porcícolas exclusivas para exportación, y de consorcios turísticos e inmobiliarios que invertirán en la región, especulando con el valor del suelo y extrayendo el máximo ganancias de la nueva dinámica económica, y derramando las consecuencias negativas sobre una maltrecha clase trabajadora y popular, tan abundante, capacitada y abaratada de la región.
Actualmente en la región del sureste mexicano se cuenta con la presencia de empresas dedicadas a la manufactura de exportación de:
Cerveza
Aero partes
Cables y arneses
Productos textiles
Joyería fina, solo en el estado de Yucatán, se cuenta con media docena de maquiladoras de joyería para su exportación, representando alrededor del 37 % del total de exportaciones para el estado
Agroindustria
Derivados de plástico
Componentes electrónicos
etc
Y tan solo para el año 2016 la región sur-sureste del país exportaba productos tales como:
Carne de cerdo
Miel de abeja, siendo Yucatán el principal exportador de miel del país, exportada a países como Alemania y a países del continente asiático -de igual forma campeche es un estado productor y exportador de miel-
Chile habanero
Petróleo y gas
Productos del mar, como: pepino de mar, pulpo, camarón, jaiba
Frutos tropicales, como: mango, sandia, piña, plátano, limón, papaya, pitahaya
Semillas
Mármol y granito
Madera exótica
Tabaco
etc
Datos de secretaria de economía, 2016 ([i])
EL T-MEC:
El tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, es un acuerdo comercial llevado a cabo y reafirmado entre estos 3 países, mismo que ha sustituido al antiguo TLCAN cuyo principal objetivo fue consolidar un intercambio comercial más amplio y libre entre sus socios, de igual forma el T-MEC favorecerá la presencia de inversión extranjera -capital financiero- y con ello dinamizar la integración comercial del país con la región ([i]).
Este tratado representa a una de las zonas comerciales más importantes del mundo y la más importante -por el volumen de comercialización- del continente americano, desde la década de los 90 cuando México formo parte de la integración comercial internacional, solo se han visto beneficiados los capitalistas nacionales -tales como BIMBO, CEMEX, Grupo CARSO, TELMEX, etc.- y las consecuencias de la abrupta dinámica han sido cargadas por los hombros de la clase obrera y del campesinado medio y empobrecido.
Uno de los sectores que más se han visto favorecidos con la firma del Tratado de Libre Comercia de América del Norte, ha sido el Comercio Internacional, las exportaciones nacionales se han visto beneficiada al contar con una serie de tratados comerciales que, reducen las barreras arancelarias entre sus miembros, siendo este el más importante para el país en materia de comercio, los economistas burgueses no reparan en elogiar las políticas comerciales que han sumido a la clase trabajadora a la precarización y a la esclavitud de la manufactura.
Solo en el año 2013 -en vísperas del XX aniversario de la entrada en vigor del TLCAN-, el volumen comercial de esta región sumaba alrededor de 130 millones de dólares por hora (en exportaciones), México percibió alrededor de 28 mil 234 millones de dólares en inversión extranjera proveniente de sus socios comerciales -Canadá y Estados Unidos-, el comercio total de México con la región, cerro aquel año en aproximadamente 742,000 millones de dólares ([i]).
La reafirmación de este tratado representa el incremento de las ganancias generadas por el comercio en esta zona del mundo, y reafirma que el Estado mexicano tiene como importancia mantener los intereses de los capitalistas -tanto mexicanos, como canadienses y estadounidenses-, por encima de los de la clase obrera y de los sectores populares.
El volumen de comercio existente entre los 3 países, representa un incremento favorable en la acumulación de capital de la burguesía regional y una pérdida para los trabajadores. La gestión socialdemócrata que actualmente ostenta el poder, es la continuadora de defender estos intereses, gestionando y asegurando el máximo beneficio para este reducido grupo, a través de este tipo de tratados inter-burgueses, que al igual que las gestiones anteriores se han llevado a cabo, dejando a la deriva y a merced de la precarización al campesinado empobrecido que día con día le cede terreno a las multinacionales que privatizan el campo, a las comunidades originarias al borde de la reubicación y perdida de su autodeterminación y a la clase obrera la termina por condenar al infierno fabril con condiciones de semi esclavitud.
EL TMEC Y EL TREN MAYA:
Recapitulando, el proyecto del tren maya, no solo responde a la necesidad de conectar logísticamente al sur-sureste con el resto del país, objetivo que ha sido usado por parte del gobierno federal como pretexto para lograr la aprobación popular, sino, que esconde en su interior un fin en beneficio de la burguesía. Y que, con tal de cumplir con las demandas y necesidades de seguir acumulando riquezas, pasaran por encima de los intereses y lucraran con las necesidades de la clase obrera, de las comunidades originarias y del campesinado.
Por la magnitud del proyecto, se espera que traiga consigo una dinámica económica nunca antes vista en esta zona del país -dinámica mucho mayor que la que tuvo la región del caribe con el auge de la industria turística-, trayendo consigo una alteración en la cotidianidad y en las relaciones sociales actuales que rigen la región, un descontrolado flujo migratorio proveniente no solo del interior del país -el tren maya traerá consigo un aumento en la dinámica migratoria en busca de mejores oportunidades laborales y en condición de vida-, sino que también de las comunidades originarias que se verán forzadas a desplazarse para sobrevivir, viendo precarizada su fuerza de trabajo, e impulsara la pauperización de la mano de obra, siendo esto el resultado del desarrollo y progreso dentro del capitalismo.
Las características de la región la vuelven atractiva para los intereses capitalistas, mismos que desde décadas pasadas han venido gestionando políticas y estrategias para la explotación total de la zona, y que, con la llegada de la socialdemocracia al gobierno han empezado a ver materializados sus objetivos.
El sureste no solo cuenta con grandes extensiones de tierras disponibles para la agroindustria, minería a cielo abierto, para la construcción naves industriales, etc.., sino que de igual forma cuenta con un extenso volumen de mano de obra calificada, y abaratada -siendo los estados del sur-sureste los que poseen los salarios más bajos del país ENOE 2020[i] (con excepción de cd del Carmen, Campeche), disponible para ser ocupada por la industria maquiladora y manufacturera de exportación.
Cobrando aún más importancia la reafirmación del acuerdo comercial multinacional con México, Estados Unidos y Canadá -TMEC-, como principal promotor de la llegada de inversión extranjera directa para esta zona del país, y que con la construcción del tren maya significara una herramienta necesaria para dinamizar el sector exportador y con ello permitir la llegada de más empresas especializadas en esta rama.
Al poseer una línea férrea de tal magnitud, conectado a toda la región y a los principales puertos comerciales como puerto progreso -donde se busca crear una línea férrea que conecte al puerto con el resto de la ruta del tren maya-, Coatzacoalcos y Salina Cruz -proyecto del corredor transístmico- y reafirmando con el tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, se vuelve aún más necesaria y atractiva la construcción de una infraestructura útil para explotar este sector y con ello dar paso al auge de la industria de la fabricación, es decir, impulsar y desarrollar las fuerzas productivas para acrecentar la exportación y con ello la acumulación de capital, trayendo consigo la llegada de naves industriales, consorcios turísticos, etc., mismos que solo ofrecen puestos de trabajos precarios y en condiciones pésimas para la salud y la vida de los y las trabajadoras, dejando a la clase trabajadora a merced de los embates del capitalismo.
Es vital entender la conectividad de los proyectos que se llevan a cabo en el país, puesto que todos estos responden a la necesidad de acelerar la maquinaria capitalista y con ello acrecentar la extracción de plusvalía -generada por el proletariado-, llevados a cabo por la falsa promesa de progreso y mejores condiciones de vida para los habitantes de las regiones donde se llevan a cabo.
[i] Salarios en México, Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, primer trimestre, 2020. Consultado en: https://www.inegi.org.mx/contenidos/programas/enoe/15ymas/doc/resultados_ciudades_enoe_2020_trim1.pdf
Bibliografía: Karl Marx, El capital, Libro I, Vol. III, Cp. XXII, “Ley de General de la Acumulación Capitalista”, Ed. Siglo XXI. Karl Marx, El Capital, Libro 3, Sección Séptima, Cp. LI, “Relaciones de distribución y relaciones de producción”. Karl Marx, “Introducción a la crítica de la economía política”, 1859.
[i] “Una apreciación crítica sobre el TLCAN a 20 años”,2014. Consultado en: https://www.senado.gob.mx/comisiones/relext_an/eventos/docs/RRM.pdf
“Graficas que te explican el intercambio comercial”, El Financiero 2013. Consultado en: https://www.elfinanciero.com.mx/economia/graficas-que-te-explican-el-intercambio-comercial-entre-cada-uno-de-los-socios-del-tlcan
[i] RESUMEN DEL TRATADO DE LIBRE COMERCIO MÉXICO-ESTADOS UNIDOS-CANADÁ(T-MEC). Consultado en: http://comisiones.senado.gob.mx/puntos_constitucionales/docs/TMEC/resumen_SE_050619.pdf
[i] Exportaciones de la península de Yucatán. Consultado en: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/168554/atlas_Yucatan_2016_1125.pdf https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/168537/atlas_Campeche_2016_1125.pdf https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/170020/Atlas_ZM_Cancun_2016_1124.pdf
[i]“Exportación de carne de cerdo en Yucatán”. Consultado en: https://www.porcicultura.com/destacado/Pese-a-los-obstaculos-del-2020%2C-la-porcicultura-yucateca-se-mantiene-estable
“Exportación de carne de cerdo desde Yucatán va a buen ritmo”. Consultado en:https://sipse.com/novedades-yucatan/exportacion-carne-cerdo-paises-produccion-economia-yucatan-330009.html
[i] “Maquiladoras tipo INDEX en Yucatán”. Consultado en: http://indexyucatan.org.mx/miembros/
[i]“El sur, región clave para diversificar las exportaciones mexicanas”, 2018. Consultado en: https://www.forbes.com.mx/sur-region-clave-diversificar-exportaciones-mexicanas/
“El sur de México aporta apenas 11% de las exportaciones”. Consultado en: https://www.forbes.com.mx/sur-mexico-aporta-11-exportaciones/
[i]“El sureste de México se une”, El Economista, 2019, consultado en: https://www.eleconomista.com.mx/estados/El-sur-sureste-de-Mexico-se-une-20190815-0008.html
“Pacto Oaxaca”: proyecto en el que se busca marcar el nuevo rumbo del Sur-Sureste del país, para la transformación de la zona. Consultado en: http://comunicacion.senado.gob.mx/index.php/informacion/boletines/45884-pacto-oaxaca-transformara-el-sureste-de-mexico-en-una-region-mas-prospera.html.
[i]“El tren maya y el desarrollo del capitalismo en la península de Yucatán”. R. Grajales, 2020, Revista el Machete, Edición Digital, consultado en: http://elmachete.mx/index.php/2020/08/19/el-tren-maya-y-el-desarrollo-del-capitalismo-en-la-peninsula-de-yucatan/
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