Por Roberto Grajales
Vecinos organizados en el comité de vecinos de las colonias conurbadas a la carretera Mérida-Tixkokob han intensificado sus gestiones ante las autoridades municipales y estatales, exigiendo el mantenimiento, limpieza y desazolve del cárcamo de aguas negras y las líneas domiciliarias conectadas a este sistema.
Desde el inicio de la temporada de lluvias, en numerosos hogares, el retorno de aguas negras fecales desde las coladeras hasta las tazas de baño se hizo frecuente. La gravedad del problema obligó a muchas familias a buscar refugio temporal en casas de vecinos o incluso trasladarse a otras colonias de Mérida y Kanasín, pues no era posible, ni sano, vivir de esa manera.
Además de la incomodidad, la pestilencia proveniente de las alcantarillas representa un riesgo sanitario significativo, violentando, sobre todo en la niñez, el derecho a vivir en un medio ambiente sano.
El comité vecinal ha solicitado la intervención del Municipio de Kanasín, Sin embargo, el municipio asegura no contar con la maquinaria ni el equipo necesario para llevar a cabo el dragado de las alcantarillas y conductos, ni para reactivar el cárcamo de aguas residuales.
Ante esta situación, los vecinos han acudido a instancias estatales para exigir pronta solución, argumentando que el abandono de esta infraestructura esencial no solo vulnera sus derechos básicos, sino que podría desencadenar una crisis sanitaria si no se atiende a tiempo, pues aunque ahora las lluvias han cesado, esto no quiere decir que el problema haya desaparecido.
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